–¿Cómo ves AGA hoy con respecto a la empresa que conociste en tus inicios?
Ha experimentado un gran cambio pero mantiene sus valores iniciales. Cambios provocados por las necesidades de los clientes y el mercado. Seguimos fabricando cerraduras y cilindros, pero todo más personalizado. Esta adaptación es fruto de la colaboración, lo cual nos define como una empresa dinámica y abierta. Aún tenemos camino para recorrer y ambición para hacerlo.
–¿Y el sector, como ha evolucionado?
Después de una gran crisis a nivel europeo, el sector se recupera satisfactoriamente, siendo en nuestro caso, la industria el motor de esta recuperación. Los clientes se muestran optimistas y abiertos a nuevas soluciones. Por delante se abren nuevas oportunidades, en nuevos mercados cada vez más exigentes, en los que la relación calidad precio está más presente que nunca.
–¿Cómo describirías al cliente del siglo XXI?
No cabe duda, la tecnología está en plena vorágine; internet y las redes sociales copan las primeras posiciones en cuanto a plataformas de comunicación. Esto nos obliga a adaptarnos a nuevas formas de venta y a nuevos consumidores. El comprador del siglo XXI hace que cambiemos nuestras estrategias de venta y es importante para nosotros, saber cuáles son sus rasgos. Este es su perfil, consumidores globales, exigentes con sus compras y poseedores de información.
Hoy en día cualquier persona tiene en sus manos un teléfono móvil con conexión a internet, lo cual nos indica que cualquier cliente descontento puede subir a la red una foto o un comentario. Esto lo puede hacer un cliente en Estados Unidos y verlo e influenciar a cualquier cliente del resto del mundo. El consumidor hoy, tiene más conciencia de sus ingresos y sus gastos, desde su teléfono puede acceder a una amplia oferta del mismo producto o comparar otros productos similares. Tener una buena política de relación calidad precio es fundamental. Ahora los clientes tienen toda la información necesaria en un solo click. Creo que todo lo que puede saber un vendedor, lo puede averiguar un cliente. De ahí, que la transparencia es fundamental.
–¿Cómo ves el futuro de la seguridad en los sistemas de apertura y cierre?
El futuro es la electrónica. Cerraduras electrónicas interiores y comandadas desde el exterior por lo cual no se podrán forzar. Los sistemas de aperturas pueden ser varios, tarjetas, Smartphones, mando o iWatch, tan solo con acercarnos o alejarnos podremos abrir o cerrar la puerta de nuestra casa. Con un solo dispositivo podremos abrir todas las puertas de nuestra residencia (cancela exterior, puerta de garaje, puerta del jardín, etc.). Incluso podríamos abrir las puertas en remoto para que pudiera acceder el personal de la limpieza, el técnico, el jardinero o un familiar.
Para poder disfrutar de todas esta ventajas, tendremos que utilizar plataformas tipo IOS o ANDROID, o bien a través de internet mediante una web móvil y ahí es donde está el gran dilema, ¿llegaremos a confiar la seguridad de nuestra casa a un sistema electrónico? Hoy por hoy, no hay ningún sistema que no se pueda “hackear” , aunque la información este encriptada o te pueden hacer una copia de llave virtual o de las contraseñas mediante un ataque intermediario (Man in the Middle). Creo que todavía pasara algún tiempo más hasta que todos estos avances estén totalmente blindados y podamos confiar plenamente en ellos. Mientras tanto, seguiremos utilizando las llaves convencionales, con más o menos molestias para nosotros.