El impulso a la sostenibilidad ya se está dando, y se hace desde tres vectores fundamentales. Desde el mercado, con el cambio de hábitos y preferencias de los consumidores; desde el ámbito financiero, con productos y servicios adaptados a las nuevas necesidades; y desde una regulación que amplía sus exigencias y normativas. Los acuerdos y alianzas comerciales, sobre todo aquellos que se cierran con grandes grupos industriales, nos obliga a realizar esfuerzos en todos los niveles de la empresa, pero ahora y de forma cada vez más importante, también en el terreno de la sostenibilidad. En AGA, ese compromiso y motivación crece día a día, por eso hemos implantado un proceso y metodología de trabajo, ASG+, que nos ayuda a mejorar en tres ámbitos:
- A (ambiental) – Con criterios que relacionan la actividad de la empresa y su impacto, directo e indirecto, con el medioambiente.
- S (social) – Con una clara relación entre la empresa y la sociedad, con especial atención con empleados, accionistas, clientes, proveedores y aquellas comunidades locales más cercanas.
- G (gobernanza) – Incluye tanto la forma de administración de la empresa, como el cumplimiento de normas y reglamentos externos o propios.
El reciente acuerdo firmado con Schneider Electric, multinacional francesa con 185 años de antigüedad que ofrece soluciones digitales energéticas y de automatización, y que fue reconocida como la empresa más sostenible del mundo en 2021, es un ejemplo del camino emprendido por AGA también en este terreno.
Reducción de la huella de carbono y eficiencia energética
La puesta en marcha de la metodología ASG+, no solo es un objetivo cuantificable en términos de negocio, es sobre todo un modelo que nos ayuda a mejorar como empresa.
El proceso puesto en marcha y el compromiso y responsabilidad adquirida, deriva en acciones concretas a nivel de organización interna y procesos de trabajo, pero también en avances como la reducción de la huella de carbono y la eficiencia energética.
En AGA ya llevamos tiempo planificando y realizando mejoras en la planta de fabricación, un proceso que exige incorporar nuevas tecnologías como es el sistema Cool Blaster Mist Control suministrado para los tornos Citizen.
Una instalación que incorpora avanzados sistemas de filtrado y sensores de seguridad contra posibles incidentes, eliminando además la niebla y el humo producido por el propio funcionamiento de las máquinas.
